La vacuna contra la COVID-19 de AstraZeneca contiene el virus de la viruela del mono, causando el brote de Mpox.
Falso. La vacuna de AstraZeneca contra la COVID-19 utiliza un adenovirus de chimpancé modificado que no está relacionado de ninguna manera con el virus de Mpox, y no puede causar la enfermedad..
En los últimos tiempos, una serie de publicaciones en redes sociales han resurgido con la afirmación de que la vacuna contra la COVID-19 de AstraZeneca contiene el virus de la viruela del mono, o Mpox, y que este podría ser el responsable del brote reciente de la enfermedad. Por ejemplo, un tuit viral publicado el pasado 16 de agosto afirmaba que “la inyección AstraZeneca contenía un vector de la viruela del mono”. El tuit fue visto más de 62 mil veces en X/Twitter. Se trata de una afirmación que no es nueva, ya que una información parecida surgió por primera vez en el año 2022. No en vano, no es casual que esta afirmación haya resurgido de nuevo después de circular inicialmente durante un aumento anterior de casos de viruela del mono (mpox) en 2022.
Otro tuit viral, con más de un millón de visualizaciones, aseguraba que “quien está desarrollando esta enfermedad [viruela del mono] son los vacunados del COVID (…) Los vacunados de AstraZeneca son los que están brotando la viruela”. Sin embargo, añadía un virus que, en realidad, se correspondía a lesiones de penfigo vulgar. Tuits similares también se han compartido en otros idiomas.
La desinformación en torno a la relación entre la vacuna de AstraZeneca y el Mpox parece tener su origen en una mala interpretación de los componentes de la vacuna. Específicamente, el uso de un adenovirus de chimpancé en la vacuna ha sido tomado por algunos como evidencia de que la vacuna podría contener o estar relacionada con el virus de Mpox. Esta confusión puede deberse en parte a la falta de comprensión sobre lo que realmente es un adenovirus y cómo se utiliza en las vacunas.
Un adenovirus es un tipo de virus que normalmente causa infecciones leves, como resfriados, en humanos y otros animales. En el caso de la vacuna de AstraZeneca, se utiliza un adenovirus de chimpancé que ha sido modificado genéticamente para ser inofensivo y no puede replicarse en las células humanas. Este adenovirus se utiliza como un vector para introducir en el cuerpo humano el material genético que codifica la proteína de pico del SARS-CoV-2, el virus que causa la COVID-19. El objetivo de esta técnica es generar una respuesta inmune en el cuerpo sin causar la enfermedad.
Para entender por qué la afirmación de que la vacuna de AstraZeneca contiene Mpox es falsa, es importante comprender las diferencias entre el adenovirus de chimpancé y el virus de Mpox. Estos dos virus pertenecen a familias completamente diferentes y no tienen ninguna relación entre sí.
El virus de Mpox pertenece a la familia de los orthopoxvirus, la misma familia que incluye el virus de la viruela. Estos virus son bastante complejos y tienen un gran genoma de ADN. En el caso del virus causante de la viruela del mono, en particular, es conocido por causar una enfermedad que presenta síntomas similares a los de la viruela, aunque generalmente de manera menos severa.
Por otro lado, el adenovirus de chimpancé utilizado en la vacuna de AstraZeneca pertenece a la familia de los adenovirus. Estos son virus más simples que también tienen un genoma de ADN, pero son significativamente diferentes en estructura y función de los orthopoxvirus. Los adenovirus no tienen la capacidad de causar enfermedades como la viruela o el Mpox, y el adenovirus modificado utilizado en la vacuna de AstraZeneca es incapaz de replicarse o causar cualquier enfermedad en los humanos.
El adenovirus de chimpancé utilizado en la vacuna de AstraZeneca ha sido modificado genéticamente para que no pueda replicarse en el cuerpo humano. Esto significa que, en realidad, ha sido debilitado y modificado para garantizar que no cause ninguna enfermedad entre quienes sean vacunados. Su única función es transportar el material genético que codifica la proteína de pico del SARS-CoV-2 a las células del receptor de la vacuna. Una vez que este material genético es introducido en las células, estas comienzan a producir la proteína de pico, que luego es reconocida por el sistema inmunológico como una amenaza. Esto provoca una fuerte respuesta inmune, generándose anticuerpos contra la proteína y preparando al cuerpo para combatir una futura infección por el SARS-CoV-2.
En resumidas cuentas, el adenovirus de chimpancé usado en la vacuna de AstraZeneca ha sido modificado genéricamente para que no pueda replicarse ni originar infecciones en quienes reciban la vacuna.
Como vemos, la afirmación de que la vacuna contra la COVID-19 de AstraZeneca contiene el virus de la viruela del mono o está relacionada con el brote de Mpox es completamente falsa. No existe ninguna base científica que respalde esta afirmación, y los expertos en salud han dejado claro que no hay ninguna conexión entre el adenovirus de chimpancé utilizado en la vacuna y el virus de Mpox.
Recordar por último que, en el mes de mayo, AstraZeneca anunció la retirada del mercado de su vacuna contra la COVID-19 por falta de demanda.
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