La ivermectina reduce la carga viral del dengue y alivia los síntomas en menos de 72 horas.
No hay evidencia científica de que la ivermectina sea eficaz contra la dengue, y su uso en dosis altas puede causar daño hepático.
La ivermectina, un fármaco antiparasitario, se ha difundido en las redes sociales como una supuesta cura para el dengue, una enfermedad infecciosa transmitida por mosquitos. Sin embargo, esta afirmación es falsa y carece de evidencia científica. Además, el uso indebido de este medicamento puede causar intoxicaciones graves.
El dengue es una enfermedad vírica que afecta a millones de personas cada año, especialmente en regiones tropicales y subtropicales. Se caracteriza por fiebre, dolor de cabeza, debilidad y erupciones cutáneas. En algunos casos, puede provocar complicaciones graves, como hemorragias, shock y muerte. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el dengue es una de las principales causas de enfermedad y mortalidad en los países en desarrollo.
La prevención del dengue se basa en el control de los mosquitos que la transmiten, los del género Aedes, mediante medidas como el uso de repelentes, mosquiteras, eliminación de criaderos y fumigación. También existen vacunas contra el dengue, que han demostrado ser seguras y eficaces en algunos países, pero que aún no están disponibles de forma generalizada.
En cuanto al tratamiento, no existe un medicamento específico para curar el dengue. Lo que se hace es proporcionar apoyo clínico a los pacientes, con hidratación, analgésicos y vigilancia de los signos de alarma. La OMS recomienda evitar el uso de aspirina y antiinflamatorios, ya que pueden aumentar el riesgo de sangrado.
Sin embargo, en las redes sociales (como X, Facebook e Instagram), se ha difundido la idea de que la ivermectina, un fármaco antiparasitario, es capaz de reducir la carga viral del dengue y aliviar los síntomas en menos de 72 horas. Esta afirmación se basa en un texto atribuido a dos profesores de la Universidad de Buenos Aires, titulado “Ivermectina en la profilaxis y el tratamiento del dengue”, que encontramos publicado en ResearchGate en abril de 2023, en el que se recomienda el uso de la ivermectina como una “alternativa eficaz, sencilla, segura y accesible” para “erradicar” el dengue. Sin embargo, no ha sido publicado en ninguna revista científica ni sometido a revisión por pares.
El texto afirma que la ivermectina ha demostrado su eficacia contra el dengue en estudios in vitro, es decir, en células cultivadas en laboratorio. Pero esto no implica que el mismo efecto se produzca en seres humanos, ya que la dosis necesaria para inhibir el virus podría ser tóxica o causar efectos secundarios.
Además, el uso de ivermectina en dosis superiores a las indicadas puede causar problemas hepáticos graves, como hepatitis medicamentosa. Esto se ha observado en algunos pacientes que tomaron ivermectina como supuesto tratamiento para la COVID-19, otra enfermedad para la que no hay evidencia de su eficacia, como volvió a encontrar un ensayo publicado en febrero de 2024. En este caso, sus autores concluyeron que es “poco probable” que “proporcione una mejora clínicamente significativa en la recuperación, los ingresos hospitalarios o los resultados a largo plazo”.
Por todo ello, las autoridades sanitarias de varios países, como Brasil, Portugal y Paraguay, han desmentido la información falsa sobre la ivermectina y el dengue, y han advertido de los riesgos de su uso indebido. Mientras que el Ministerio de Salud de Argentina publicó un comunicado oficial de las medidas para prevenir la enfermedad, sin mencionar a la ivermectina. Asimismo, han instado a la población a seguir las recomendaciones oficiales para prevenir y tratar el dengue, y a consultar con un profesional de la salud ante cualquier síntoma.
Como ocurrió con la pandemia de COVID-19, la afirmación falsa surge en un contexto de incremento de casos de dengue en el mundo. En Argentina, por ejemplo, de acuerdo con el Boletín Epidemiológico del Ministerio de Salud, desde comienzos de 2024 se han registrado más de 40.000 casos en el país.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), ningún fármaco ha probado su efectividad para curar el dengue hasta la fecha. Es más, como señaló Karin Kopitowski, jefa de Servicio de Medicina Familiar y Comunitaria Hospital Italiano de Buenos Aires y presidenta de la Federación Argentina de Medicina Familiar y General (FAMFyG), en una consulta de AFP Factual, si bien es cierto que existen “algunos estudios in vitro, es decir, en laboratorio, no en humanos” que “han sugerido que la ivermectina podría tener efectos antivirales contra el virus del dengue”, “la investigación es preliminar y no hay consenso científico ni recomendaciones de uso de ivermectina para el dengue en humanos basadas en ensayos clínicos robustos y controlados”.
Y agregó: “La única medida preventiva específica contra el dengue es la vacunación, que está disponible en algunos países, como Argentina, para personas en grupos de edad específicos y bajo ciertas condiciones”.
Por tanto, calificamos la afirmación como falsa: no es cierto que la ivermectina sea capaz de reducir la carga viral del dengue y aliviar los síntomas en menos de 72 horas.
Referencias:
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