PUNTOS CLAVE
- El estudio analizó 13,9 millones de niños y mostró que la infección por COVID-19 eleva notablemente el riesgo de miocarditis, trombos y síndromes inflamatorios.
- Tras la vacunación, los efectos adversos fueron raros y se limitaron a las primeras semanas, sin señales a largo plazo.
- Los riesgos tras la infección se mantuvieron durante más de 12 meses, mientras que los de la vacuna fueron transitorios y poco frecuentes.









